Casino Royale.

Casino Royale: Crimen de lesa humanidad.
Delincuencia institucional y organizada, de la mano.
LNSP: Punta de lanza de un Estado policíaco.
EUA: Un amigo, que vale por mil enemigos.
Hombre, solidario, del hombre. No su lobo.
Testimonos: Blog. Un futuro, con futuro, para el Mundo.
Por Cipriano Barreto Mendoza.
Tardíamente, Calderón solicita, de la manera más atenta, que los EUA, si han decidido consumir drogas, escojan otra ruta que no sea nuestro país.
Al mismo tiempo, califica a nuestros “vecinos, socios y amigos”, de corresponsables de la violencia, en nuestro país.
“Los mayores consumidores de drogas y vendedores de armas”, nos han llevado al baile, con sus acciones.
Se le “olvidó”, que también EUA, es líder en lavado, de gran parte de las utilidades de las actividades criminales, “irregulares” e informales.
Todos los adjetivos, en contra de los autores directos de la tragedia, son aplicables a las autoridades de los tres niveles, que con sus acciones criminales, cooperaron a su magnitud y gravedad.
El hecho delictivo, por su dimensión e impacto, es un peso, que calderón quiere utilizar para inclinar la balanza, para una Ley autoritaria y represiva dizque por la Seguridad Nacional.
Esta tragedia, como las centenas de miles que se dan en México, no son por falta de un protocolo de Seguridad, sino porque las leyes existentes, “se acatan, pero NO se cumplen”.
Son letra muerta.
Empezando por la Constitución, que desde 1917, garantiza un salario mínimo, para que el ciudadano(a) pueda proveer a su familia, de lo indispensable, básico y de lo necesario.
Casi un siglo después, esto es letra muerta y quieren una Ley de Seguridad, que se “cumplirá”, por gracia y obra de los violadores (institucionales y organizados) de las leyes y regulaciones “vigentes”.
Los actos criminales, lo son, NO por su impacto mediático, sino por el quebranto del protocolo que hace posible la convivencia, entre los miembros y grupos de la Sociedad.
La muerte de 52 personas, la mayoría mujeres y de la tercera edad, por asfixia y quemaduras, es un acto extremo de delincuencia organizada. Pero.
El hecho de que, no existieran puertas de escape y/o que estuvieran simuladas o tapiadas, ¿No es un crimen de delincuencia institucional?
La proliferación y autorización de casinos y casas de apuestas, ¿No es violatorio de reglamentos de construcción, viabilidad, seguridad y de uso de suelos?
¿Quiénes, solaparon y aprobaron, su quebranto?
¿La delincuencia organizada? O.
¿Autoridades institucionales, de los tres niveles?
Así podemos continuar, con una larga, larguísima lista de violaciones a las leyes vigentes, que son permitidas con amparos, que respaldan decisiones de jueces “a modo” y de “a cómo”.
Esta masacre, no es muy distinta de la de los emigrantes en San Fernando, ni la de la guardería ABC, ni los más de 40 mil muertos de la guerra a las drogas.
Es indignante y “estúpida” y es censurable y de lesa humanidad. Pero.
Esta multiplicada por cientos de miles, con el desempleo, con los bajos salarios, con la concentración de la riqueza, en el 1%.
Estos millones de millones de Casino Royale, no tienen el impacto mediático, de la tragedia en Monterrey, pero tienen efectos y consecuencia más graves y de mayor duración en nuestra comunidad.
Precisamente, la concentración de la riqueza, los salarios inconstitucionales y el desempleo galopante, han quebrantado a la comunidad y lo que hoy tenemos como consecuencia, es la Descomposición Social.
Una tragedia enorme, que nos arrastra a que la recomposición de la Sociedad, no sea factible en el corto plazo, ni en el mediano, sino que por el contrario, nos lleva a una espiral de tragedias todavía mayores.
“Todavía mayores”, significa:
Múltiples Casino Royale.
Una solución, estaría en:
Frenar y revertir la Concentración de la Riqueza.
Salario Mínimo Constitucional y/o Salario Mínimo Global.
Empleo y/o Educación a quién lo solicite, con SMC.
Cancelar rescate bancario Fobaproa-IPAB, para financiar lo anterior.
Se pueden agregar otras medidas, pero estas serían un buen principio.
Y dejar en el pasado, que el hombre es el lobo del hombre.
El hombre, puede ser solidario del hombre.
Si nos lo proponemos.
Una mejor humanidad es la solución.
No una policía más represiva.